Pudo haber muerto por tortura tras encontrar el cuerpo en un charco de agua, apuntan las investigaciones.
Saltillo, 13 de noviembre (Vanguardia).- Luego del fallecimiento de un detenido al interior de la delegación de la Fiscalía General de la República (FGR), las autoridades ministeriales ya iniciaron las diligencias correspondientes para esclarecer los hechos.
El deceso se registró alrededor de las 19:00 horas de ayer, siendo confirmado por paramédicos de la Cruz Roja el deceso de un hombre de 31 años, de origen sinaloense y que habría sido entregado por la Guardia Nacional (GN) durante el miércoles.
No obstante, los generales del finado, así como los probables delitos por los que se encontraba asegurado al cierre de esta edición no fueron revelados por las autoridades que están manejando el caso de una manera muy hermética.
Fuentes extraoficiales indicaron que los reportes emitidos a los servicios de emergencia apuntaban a que la víctima sufrió un desvanecimiento muy repentino y cayó de su propia altura, lo que aparentemente causó que perdiera la vida de manera instantánea.
También otras fuentes señalaron que pudo ser tortura porque el cuerpo se encontraba totalmente empapado y que yacía en medio de un charco de agua al interior de las instalaciones de la FGR, sin que se dieran más pormenores de estas circunstancias.
Personal de la unidad de investigación de homicidios de la Fiscalía General del Estado (FGE) acudió al recinto para tomar conocimiento de los hechos, y en una breve maniobra realizaron el levantamiento del cuerpo para su traslado al Semefo.
Será mediante la necropsia de ley que se determinen las causas exactas de la muerte de la persona para determinar si se trató de un fallecimiento por causas naturales o si la muerte ocurrió de forma violenta durante su estadía en las celdas federales.
Fuentes extraoficiales indicaron que los reportes emitidos a los servicios de emergencia apuntaban a que la víctima sufrió un desvanecimiento muy repentino y cayó de su propia altura.
